Hoy una amiga de nuestro blog nos escribió para contarnos su historia:
En marzo del corriente año, María Fernanda, encontró en la costanera de Santa Teresita, una perra con tres cachorros. Durante más de un mes dedicó su tiempo a curarlos (tenían hongos en la piel) y alimentarlos.
Gracias a Dios, esta historia tuvo un final feliz, ya que los cuatro fueron adoptados, previa castración de la hembra adulta. Pero no todos los animales corren la misma suerte, es por ello, que debemos tomar esta acción como ejemplo. No sólo ayudar al necesitado, además, debemos aprovechar las campañas de castración para nuestras mascotas y las que no los son (colaboremos con un animalito sin dueño). De este modo evitaremos nuevos nacimientos y en consecuencia no habrá más cachorros abandonados.
En marzo del corriente año, María Fernanda, encontró en la costanera de Santa Teresita, una perra con tres cachorros. Durante más de un mes dedicó su tiempo a curarlos (tenían hongos en la piel) y alimentarlos.
Gracias a Dios, esta historia tuvo un final feliz, ya que los cuatro fueron adoptados, previa castración de la hembra adulta. Pero no todos los animales corren la misma suerte, es por ello, que debemos tomar esta acción como ejemplo. No sólo ayudar al necesitado, además, debemos aprovechar las campañas de castración para nuestras mascotas y las que no los son (colaboremos con un animalito sin dueño). De este modo evitaremos nuevos nacimientos y en consecuencia no habrá más cachorros abandonados.